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De un día para otro y sin darnos cuenta, nuestras conciencias como ciudadano cambiaron. Nos abrimos a ver realidades que están cerca de nosotros y sentimos la necesidad y el dolor de todas esas personas que sufren, esta conciencia nos saco a las calles para exigir cambios. Si nosotros cambiamos, el país debe cambiar.
Horizontal en agradecimiento a cámaras Fujifilm, líderes en fotografía urbana a nivel mundial, queremos presentarles a 10 fotógrafos de todo Chile que han retratado estas semanas de despertar social. Cada fotógrafo publicado en este espacio nos cuenta su experiencia y nos comparte sus 5 mejores imágenes. Les damos las gracias por mostrar con nosotros su trabajo, que sin duda, llegara a muchos corazones.
Christian Monsalve Moraga - Santiago
Desde que comencé a adentrarme en el mundo de la fotografía he leído y escuchado frases como “la fotografía es retratar el mundo según tu visión”, o “hacer una fotografía es capturar el momento”. Desde el 18 de Octubre las manifestaciones sociales en la capital de nuestro país se han intensificado, estamos viviendo un momento histórico en el que incluso hemos marchado un millón doscientas mil personas por la Alameda (Según cifras de la intendencia). Como fotógrafo nunca me había sentido más de acuerdo con las afirmaciones iniciales, y siento tanto una responsabilidad social, como una presión ética de estar presente, para dejar un registro de la época en que estoy, de las manifestaciones y del uso desmedido de poder de represión, de las fuerzas policiales.
He salido con amigos que me han dicho “Temo más por ti, que por mi. Cuando todos retroceden, tú avanzas”; Creo que muchos se sentirán identificados, al estar en primera línea creando un registro audiovisual o fotográfico, podemos estar capturando el momento ícono de la manifestación (Como en el caso de Susana Hidalgo), la imagen para convocar a marchar (Como Jaime Kunstmann), o siendo el registro que ayude a resguardar o defender a algún compañero/a que lo necesite. Al estar ahí, no pensamos en el peligro, nuestro trabajo es permanecer allí, por mucho que podamos sufrir perdidas de equipo, sufrir lesiones o incluso perder la vida, como Chris Hondros.
Participe de las marchas en Osorno y quise retratar lo transversal de quienes participan, niños, adultos mayores, jóvenes, familias, algunos con letreros improvisados, otros muy artísticos, muchos extremadamente creativos pero todos con un mensaje claro. Con las imágenes que dejo, la consigna es clara. No somos un partido político, no somos jóvenes ignorantes, no somos delincuentes, no somos pensionados conformes, no somos trabajadores contentos, somos un Chile que despertó, un Chile que no tiene miedo, un Chile que lleva 30 años tolerando el abuso de políticos, un Chile que quiere igualdad.
Me inicié en la fotografía hace 4 meses, comencé intentando hacer fotografía de calle y de repente, Chile no aguantó más y me dio esta oportunidad de fotografiar descontento, conexión y caos.
Me motiva mucho salir a fotografiar, dejar registro del sentir social y aportar a la memoria colectiva desde un lado creativo, que permita recordar el porqué nos aburrimos y nos rebelamos frente a ese estatus quo que nos tenía aletargados.
He tenido muy buena suerte a la hora de sacar fotos en estos días, la calle me ha brindado momentos muy especiales para fotografiar, sin embargo, si he visto malas experiencias del resto de los manifestantes, personas heridas por perdigones, desorientadas con el gas lacrimógeno y golpeadas por los pacos culiaos, sí, pacos culiaos.
Mi trabajo intenta entregar espacios y momentos cotidianos de la protesta, procuro retratar las manifestaciones tal y como son, mi idea es que el espectador pueda dialogar con algún aspecto sin haber estado presente en ese momento, creo que el 50mm me ayuda bastante para lograr ese cometido, entendiendo que es similar a lo que vería el ojo normalmente.
Instagram: @ferrettob
Daniela Cifuentes Almendras - Concepción
La actual contingencia social nos involucra a todos por igual. Desde que comenzaron las movilizaciones en Concepción me propuse asistir a cada manifestación para aportar de esta forma a llevar un registro de lo que ocurre para quienes no pueden asistir y desconocen lo que pasa realmente en la ciudad. Es una experiencia realmente gratificadora, estar presente y hacerse parte de la lucha de miles de personas, es algo impagable. Siempre está presente el peligro de toparse de manera directa con los gases lacrimógenos y el implacable “guanaco” pero la necesidad de generar un buen resultado es tan fuerte que convierte a estos contratiempos en los antagonistas con los que se debe lidiar y ya. En sí creo que he tenido suerte ya que compañeros del rubro han sido detenidos por el hecho de estar parados, tal vez, donde no deberían. Por mi parte he escapado solo de recibir proyectiles por ubicarme en lugares centrales de enfrentamientos.
La experiencia es extraordinaria y el recibimiento de quienes comparten el trabajo final me llena completamente pues es la forma de decir esto lo hice yo y es mi aporte para todo un pueblo en conflicto y que sientan también que hay quienes están dispuestos a combatir desde un lente la desigualdad que se vive actualmente en nuestro país.
Mi mayor motivación para salir a fotografiar es el deseo de mostrar una realidad que no esta presente en la televisión, los momentos ajenos a los ojos de la mayoría de las personas. Siento una gran atracción por realizar composiciones en el caos, me motiva usar mi camara como un arma para mostrar mi visión cruda de la realidad y ponerle una voz a lo que no la tiene.
Ha sido peligroso, principalmente por tratar de estar en los enfrentamientos con la policía, fui quemado por una lacrimógena y tengo algunas heridas en mi pierna por las piedras que son lanzadas de lado y lado, aún así , vale la pena salir a apoyar esta protesta y registrar estos momentos históricos. El mayor peligro de mi parte es que soy extranjero y estar involucrado en estas fotografías podría causarme problemas, pero esta es mi vocación.
Siento que mi aporte es usar mi fotografía como un registro del levantamiento y la fuerza de la gente, para mostrar los abusos realizados por parte de la policía, para registrar momentos que están escondidos y ningún canal de tv puede ver.
Desde que empecé a hacer fotos con intensión "seria" me ha llamado la atención narrar con la fotografía como el ser humano se relaciona con su entorno. Desde un punto de vista compositivo, estético o simplemente explícito. Estos últimos días hemos vivido en Chile una suerte de explosión social, donde muchos cansados de la adversidad, la desigualdad y el alto costo de la vida salieron a manifestarse. Estos días donde la expresión de sociedad es bastante espontánea, explosiva y sentida, me motiva a capturar de una manera más natural estos hechos. El retrato de este hecho histórico no quedará en el olvido gracias a las miles de imágenes memorables que se hacen a diario. Es grato formar parte de ello y colaborar en lo posible a documentar el ambiente, acciones u ocurrencias del un pueblo que de una manera u otra clama justicia.
Jamás había hecho fotos en una manifestación de este tipo. Mis recomendaciones son: Vaya ligero, con máscara, agua y avise a alguien donde estará cada periodo de tiempo. Lo dice alguien que trago gas lagrimógeno, fue mojado, le volaron piedras por la cabeza, casi le pegan perdigones, etc... Recomiendo siempre estar atento a lo que sucede, no usar audífonos, no estar pendiente de celular, en general evitar cualquier distracción. No solo puede que pierdas una buena foto. Puedes que resultes herido o sin equipo si estas distraído.
No es solo de ahora o de hace unos días atrás, creo ya va un mes, lo mío es de toda la vida y busca que se pueda ver, lo que no se llega a ver. La fotografía ayuda a denunciar, pero también a mostrar a las miles de familias, niños y niñas, personas mayores y ciudadanía en general trabajando unida por un futuro mejor. Lo que me motiva es poder mostrarlo todo junto a mis compañeros de Agencia, quienes son un pilar fundamental en la pega. El trabajo nunca es sencillo, pero se hace ameno a medida que avanzas y logras generar diálogo, la curiosidad de ver que está pasando nos lleva cerca de las personas, tan cerca que te rozan los perdigones por el cuerpo, sientes los gases entrando a tus pulmones o te mojas por el agua o la lluvia de la ciudad, el peligro es parte de. Ya van tres oportunidades donde me apuntan a menos de un metro, la última vez me salvó una chica de las unidades de primeros auxilios quien con su cruz improvisada de lápiz y papel gritó para parar el percutor, no se ni su nombre, pero es mi heroína. No todo es malo, te llegan mensajes con emoción explicando que la abuelita de la última foto es la Tía del Aseo de la U o la familia a la cual pillaste abrazada se vuelve a emocionar con la imagen, yo me doy por pagado.
La fotografía apoya la contingencia dando esperanza, esperanza en que la muerte no quedará impune y que quienes ya no tienen nada que perder, tengan mucho por que soñar.
Los días pasan y son duros, ver sangre es difícil. El disparo a mansalva por parte de carabineros es preocupante, todos los días salgo pensando como sería mi vida con un solo ojo. Estos días han remecido mis vísceras, ver un movimiento de masas de esos que uno escuchó, de los que ya pasaron y no volverían a pasar. Uno trata de aportar en lo que puede y desde la imagen se hace todo lo posible, la denuncia, el registro y la historia que queremos contar de ese Chile que despertó.
Desde que estalló este descontento social junto a las protestas, he intentado salir a fotografiar cada vez que puedo. Lo que más me gusta en la fotografía es capturar momentos, ojalá robar una foto a las personas en sus actividades sin que se den cuenta. Por lo mismo, durante estas movilizaciones, la mayoría de mis fotos son precisamente retratos de los manifestantes, quiero inmortalizar las emociones de las personas en las calles, su descontento, rabia, alegría, sus gritos…
Por el momento no he tenido alguna experiencia mala ya que me he enfocado en la gente, aunque ahora quiero enfocarme un poco más en “la acción”.
Cuando inició el movimiento veía incrédulo el avance de este y su magnitud.
Se declaró Estado de Emergencia y Toque de Queda. Como muchos salí a la calle a protestar y a golpear a más no poder una olla, pero sin cámara.
Pasaban los días y comencé a sentir una cierta necesidad por salir con cámara en mano a retratar el acontecer nacional. Le dije a mi esposa que saldría a fotografiar las protestas y su respuesta fue clara… le parecía extraño que no lo estuviera haciendo desde el día uno.
El primer día fue el más difícil. En televisión y redes sociales abundaban las imágenes de personas lesionadas por el actuar de la policía y militares, por lo que el miedo se apoderaba a ratos de mi persona cada vez que me acercaba para hacer una foto. Sin embargo, las ansias de querer tener una buena toma eran más fuertes. Ya lo dijo Capa años atrás: “Si tus imágenes no son lo suficientemente buenas, no estás lo suficientemente cerca”, por lo que no acercarse no es una opción.
¿Existen riesgos? Sí, siempre hay riesgos. Está en uno saber identificar y evaluar el momento. Personalmente no he tenido grandes problemas con la policía ni con manifestantes, cuando ha habido alguno que otro altercado, el mantenerme calmo y usar el diálogo como medio disuasivo ha sido suficiente. Tan solo en una oportunidad no “leí” bien la situación y terminé totalmente empapado por el carro lanza aguas. Era pasado las 21:00 horas y fue la señal para emprender el regreso a casa.
Es así como con mis fotografías pretendo mostrar las distintas realidades y sensaciones del momento. En ellas se aprecia la lucha, desesperación, pena, rabia y dolor de un pueblo que se cansó de ser ignorado.
Les damos las gracias a los 10 fotógrafos que de todo corazón mostraron su trabajo y sus pensamientos. Horizontal quiere contribuir a este momento y que mejor que desde la vereda de la fotografía, dando tribuna a quienes no tienen diez mil seguidores, a quienes en región no son mostrados o a quienes no se hacen viral pero que tienen grandes fotografías e historias que contar.
No te pierdas la próxima semana, la segunda parte de nuestro recopilatorio 10 fotógrafos en el Chile fotográfico de hoy.